Compartir cada día la construcción de ideas, sueños, esperanzas; y también la lucha con las dudas, los desvelos y las angustias; dibujando a cada instante, colectivamente, los trazos del porvenir. De eso se trata...!

lunes, 30 de junio de 2014

El Magisterio Dominicano:

75 Años Esperando por el Día del Maestro

Por: Roberto Fulcar, Ed.D.

Hace ya 75 años de ese día 6 de junio de 1939. El licenciado Virgilio Díaz Ordóñez era el Secretario de Estado de Justicia, Educación Pública y Bellas Artes, cuando se emitió la Resolución No.6-39, consagrando oficialmente el 30 de junio de cada año como Día del Maestro.

Setenta y cinco años después, la intencionalidad atribuible a esa iniciativa aún no ha encontrado concreción, pues la sociedad dominicana, cursando ya la segunda década del siglo XXI, utiliza aún a sus educadores y educadoras cual servilletas a las que, después de limpiarse las manos con ellas, se les tira al zafacón.
 
Desde la entrada al sistema de educación, pasando por el difícil transcurrir de su ejercicio durante décadas, hasta la salida por jubilación, por pensión y bajo cualquier otra condición, el magisterio -como profesión, como carrera y como desempeño-, está lejos aún de ser apetecible para nuestros jóvenes, especialmente para los más talentosos.

Igual ocurre si se ejerce en cualquiera de los niveles, modalidades y sectores de la educación, lo común y lo esperable es que las limitaciones materiales acompañen al educador durante todo el trayecto de su ejercicio. Eso lo saben nuestros jóvenes al ingresar a las universidades, por eso no les atrae estudiar educación si tienen posibilidades de abrazar otra carrera con mayores expectativas de colocación laboral; también lo saben sus padres, que no les motivarán a inclinarse por el magisterio, y así lo sabe su entorno, por las mismas motivaciones.

En un sistema educativo caracterizado en estos 75 años por la escasez de todo (excepto de presupuesto en los últimos dos años, luego que, teniendo como contexto una sociedad mayoritariamente empoderada del reclamo por el cumplimiento de la Ley General de Educación, asignando al sistema educativo el 4% del Producto Interno Bruto), nuestro magisterio ha tenido que cargar con la demanda de educación de calidad, en un contexto endógeno y exógeno que no le facilita generarla.

Devengando bajos salarios, la mayoría sin un techo propio, sin oportunidades para capacitarse, actualizarse y recrearse sanamente; sin adecuados incentivos profesionales y sin el debido reconocimiento oficial; pero también con medios e insumos educativos que hacen casi imposible una práctica docente digna y decorosa; mientras el sistema de retiro no le permite una vejez digna y tranquila, el magisterio nacional carga con una dura vida de limitaciones y prohibiciones.
 
Esta fecha ha de inspirar el reconocimiento al rol que juegan nuestros educadores y educadoras, en tanto forjadores de valores en nuestros niños y adolescentes, y baluartes en la construcción de la conciencia de la Nación, es propicia para que la sociedad revise el trato que da a los segundos padres y madres de sus hijos.

Quiero llevar hoy a mis inseparables colegas educadores y educadoras mi pensamiento más alentador, cargado de optimismo y esperanza, bajo la certeza de que alcanzaremos el día en que cambiaremos esta dura realidad por una más feliz y fructífera. Es una invitación a llevar nuestro trabajo con la frente en alto, reiterándonos en lo que somos.

Por mi parte, reitero lo que escribí hace muchos años: Soy maestro y de orgullo lo llevo, pues a pesar de ser tan mal pagada y peor tratada, el magisterio es y será la más digna y honorable de todas las profesiones!


Santo Domingo, República Dominicana
30 de junio de 2014.-





martes, 24 de junio de 2014

La Ciguapa o el Mito de la Convención Impuesta al PRD

Por: Roberto Fulcar, Ed.D
De niño, como toda mi cohorte, escuché hablar profusamente de La Ciguapa, criatura mítica femenina descrita y analizada con tantos detalles y tal grado de convencimiento por los campesinos de mi región, que parecían haber convivido largo tiempo con ella. Puede afirmarse que pocas leyendas han alcanzado tanto arraigo y expansión como esta. 
Aunque La Ciguapa es un personaje típico de la zona rural, especialmente en las regiones montañosas, de la República Dominicana, también se habla de ciguapas en Cuba. Tal vez la leyenda fue llevada por los dominicanos que fueron a luchar por la independencia de esa isla
Las primeras referencias del origen de la Ciguapa datan del 1866, con  el relato “La Ciguapa”, escrito por el escritor dominicano Javier Angulo Guridi (1816-1884). Pero la leyenda fue difundida no sólo coloquialmente, de boca en boca, sino también en distintas anécdotas y trabajos posteriores. El Diccionario de Mitos y Leyendas del Equipo NAYA comparte en su portal digital un trabajo de Elvis Nicolás García, en el que se describe a La Ciguapa como sigue:
Las ciguapas son extrañas mujeres salvajes que habitan en las montañas y poseen poder mágico. Son de tez morena, de ojos negros y rasgados, de pelo suave y lustroso, tan largo que es la única vestimenta de su cuerpo a la intemperie. En algunas regiones los campesinos dicen que son diminutas y de cuerpo desproporcionado; otros que tienen las piernas largas y delgadas; algunos afirman que son velludas y unos pocos que están bellamente emplumadas.”(pág.1) 
De generación en generación se ha transmitido la idea de las ciguapas son bellas, cazadoras y ariscas; otros dicen que son tan libertarias que si se les pone en cautiverio mueren de pena; escuché también decir que, por las noches,  suelen salir a buscar caminantes, a los que embrujan, aman y luego matan. Hay quienes afirman que las ciguapas cabalgan de madrugada en los llanos de las montañas; se dice que hacen trenzas en las crines y las colas de los caballos, y suele afirmarse que la forma de atraparlas es “un día de luna creciente con un perro jíbaro y cinqueño”.
El periódico El Nacional (2010), en un trabajo sobre las leyendas de las ciguapas,  recogió descriptores que las presentan, en unos casos, como de pequeña estatura y con cuerpo desproporcionado, y en otros, como de piernas largas y delgadas, y no faltan los que afirma que son de piel azul. Pero la caracterización más coincidente entre todos los que de ella hablan, es que La Ciguapa es una criatura similar a una mujer indiacon ojos negros rasgados y con el pelo negro, suave y lustroso; que camina con sus pies vueltos al revés, dejando huellas opuestas al rumbo al que se dirigen (Wikipedia 2014). 
Un día cualquiera, después de haberlo escuchado hablar con tanta seguridad y con tantos detalles sobre La Ciguapa, pregunté a Servio, primo de mi padre que solía visitarnos a prima noche mientras mis padres visitaban a mis abuelos maternos, dónde había visto él ciguapas. Dando vueltas a su cigarro entre los dedos, como construyendo honestidad, afirmó, para mi sorpresa: “Yo mi’mo no l’e vito, sobrino”. 

Me invadió la duda y, en lo sucesivo, siempre que pude repetí la pregunta a los mayores, para descubrir con los años  que a La Ciguapa nadie la había visto, ni siquiera sus descriptores mas detallistas. Qué tiene que ver esta evocación con la convención del PRD?. Ahí voy:
Hace unos meses, cuando la buena voluntad de tantos demócratas dominicanos (perredeistas o no) albergaban la esperanza de que se acercaba una convención democrática en el Partido Revolucionario Dominicano que daría solución a la crisis interna de la organización, escribí un artículo titulado “Una cosa que no es, llamada Convención del PRD”, convencido como ya estaba de que ello no ocurriría. Para entonces, un buen compañero y mejor amigo me acusó de pesimista.
Hoy, más convencido que ayer, porque está más estacionaria que ayer la correlación de fuerzas internas entre el grupo en control de la franquicia y la Corriente Mayoritaria del PRD, puedo afirmar, en ausencia de toda duda, lo siguiente: La convención pautada para el PRD es como la La Ciguapa, una cosa extraña de la que todos hablan, pero que nadie ha visto nunca y nadie podrá ver, que no fue, que no es y que no será, porque de hacerla, el sector minoritario que la pensó y administra tendría los mismos resultados, y a un mayor costo mayor, que entregar voluntariamente el partido que, políticamente, hace tiempo perdió.

P.D. Acabando de escribir lo que publico, llegó la información sobre la chiquitolindización del padrón. Ahora estoy más convencido aún.
_______________________________________________________________
Elvis Nicolás García (s/f), LA CIGUAPA, en el Diccionario de Mitos y Leyendas - Equipo NAYA. Recuperado el 20 de junio de 2014, de: http://www.cuco.com.ar/ciguapa.htm
El Nacional (2010). Las leyendas de las Ciguapas. REcuperado el 20 de mayo de 2014:  http://elnacional.com.do/lasleyendas-de-las-ciguapas/
Wikipedia, la enciclopedia libre (2014). CIGUAPA. Recuperado el 20 de junio de 2014, de http://es.wikipedia.org/wiki/ciguapa




martes, 3 de junio de 2014

Una grata jornada académica

Conferencia “El Pacto Educativo: Antecedentes, Contexto y Perspectivas”.


Invitado por las autoridades del recinto de Nagua de la Universidad Abierta para Adultos -UAPA-, en las personas del maestro Víctor Roque, Director de la Escuela de Educación, y el maestro Américo Holguín Ceballos, Director Académico de la extensión, tuve el placer de presentar, el pasado sábado 31 de mayo, la conferencia “El Pacto Educativo: Antecedentes, Contexto y Perspectivas”.

Cientos de profesionales y estudiantes de educación, jóvenes en casi su totalidad, se dieron cita para compartir la conferencia sobre un tema que les inquieta, el del Pacto por la Educación que ha sido recientemente firmado en la República Dominicana, a iniciativas del poder ejecutivo.

Luego de las formalidades introductorias de los anfitriones, iniciamos la exposición, que se extendió por alrededor de dos horas, con una valoración positiva sobre la iniciativa del pacto -independientemente de las opiniones que tenemos sobre su proceso de discusión y su contenido-.

Un recorrido retrospectivo nos llevó por la historia de los pactos y otras concertaciones institucionales y sociales que han tenido lugar en el país en torno a la educación, resaltando el círculo vicioso de escasez, crisis, pactos, incumplimientos, nuevas escaseces, nuevos pactos y nuevos incumplimientos que ha estado presente por décadas, deviniendo en los pésimos resultados que estamos cosechando en la materia.
Es decir, presentamos el resumen de la espesa historia de carencias, de pactos y de retrasos que nos han conducido al lugar en que nos encontramos hoy, compitiendo por los peores lugares en el mundo en casi todos los indicadores de eficiencia y calidad de la educación.

Documentamos el dinámico proceso de movilización social que tuvo lugar entre el 2009 y el 2012, en demanda de la asignación del 4% del Producto Interno Bruto para la educación, hasta llegar a la firma, en las vísperas de las elecciones presidenciales del 2012, del “Compromiso Político y Social por la Educación”, y la posterior materialización del mandato de la Ley General de Educación No. 66’97, en la materia, al formularse el Proyecto de Presupuesto y Ley de Gastos Públicos para el año 2013 con tal porcentaje incluido. 

Pasamos al análisis de la preocupante situación observada desde entonces hasta hoy, y que puede resumirse en que, mientras esperábamos la garantía, sin exclusiones, de la educación de calidad como derecho ciudadano, por parte del estado democrático de derecho, nos amenaza la conversión del sistema en un apetecido pasto financiero.
Aquí llamamos la atención sobre la decisión de colocar casi al margen del MINERD funciones como las de edificaciones escolares, la alimentación escolar, la capacitación docente, entre otras, que se han convertido en apetecibles manjares económicos para empresas y personas antes desinteresadas por la temática.

Luego analizamos la filosofía expresada en el decreto que orientó la formulación del Pacto, la participación, el ritmo del proceso,  el contenido, y algunas otras señales dignas de atención y seguimiento.

Finalmente, y como acto de responsabilidad, compartimos con el público allí congregado nuestra idea de lo que debe ser un auténtico Contrato Social por la Calidad de la Educación, su concepción, alcances, propósitos, formulación, ámbitos, componentes y garantías políticas, técnicas y sociales, tal como venimos planteándolo desde el año 2006.


La idea-fuerza de esta conferencia fue que en la República Dominicana necesitamos un Pacto por la Educación, pero no merecemos  cualquier pacto!.