Con
la Guardia Imperial, Muy Cerquita del Sol
Azua, 22 de marzo
En Azua, como en Duvergé y
Monte Cristy, el sol parece habitar más cerca de la tierra que en otros
lugares, podría decirse que las tardes allí no son aptas para calvos.
Las actividades políticas y
sociales al aire libre en Azua difícilmente se programen para antes de las seis
p.m. Así, los azuanos, que esperaban ansiosos la manifestación del
PRD-Mayoritario, miraban hacia arriba con los ojos semicerrados, mientras
torcían el cuello, como mirando el sol que venía a comérselos.
Pensábamos dar más tiempo a
que amainara el calor, pero el ex presidente Hipólito Mejía llegó directo al
punto de encuentro y se inició el recorrido justo a la hora indicada. Unas
cuadras más adelante, Luis Abinader abordó el vehículo en que se transportaba
Mejía y recorrimos la ruta establecida.
La marcha caravana partió desde el Triángulo,
formado por la Emilio Prud Homme esquina Independencia, continuando por
los barrios Simón Stridels, Villa Esperanza, La bombita, La Placeta, El
Hoyo, La Colonia, Pajarito, Pueblo Abajo, Savica, hasta el local del Partido
Revolucionario Dominicano, en la intersección de las calles 27 de Febrero y
Nicolás Mañón.
Condenó
el hecho de que un proyecto modelo como el de ISURA se haya reducido a poca
cosa en productividad e impacto, y que los canales de riego estén abandonados,
sin mantenimiento, lo que disminuye la capacidad de regadío, para concluir en
que constituye una vergüenza que el Hospital Regional Taiwán, donado por esa
nación a la Región Sur durante el gobierno de Hipólito Mejía, esté totalmente
abandonado y en estado de calamidad, quedándole sólo las paredes y las camas
Yo, que
tengo fresco el recuerdo de la dura batalla desarrollada al lado de los
perredeistas de Azua para ganar las elecciones del 2012, recuperando esa plaza
del PRD, donde el entonces candidato tuvo a bien designarme como Facilitador,
abordé por siete minutos el vehículo de la dirección, hasta que la gigantesca Marcha-Caravana se estabilizó,
para bajarme luego y disfrutarla a pie, junto a tantos amigos y amigas de allí.
En Azua
también el pueblo habló...
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